Esta semana la Comisión Europea ha vuelto a
dar un tirón de orejas a nuestro país, que no es el primero y me temo que no
será el último. Llueve sobre mojado sobre los precios que pagamos los usuarios
de móviles, que a juicio de Bruselas son excesivos. Y tampoco es la primera vez
que lo dice. Ahora no le ha gustado que la Comisión del Mercado de las
Telecomunicaciones, CMT, quiera retrasar un año el calendario de rebajas de las
tarifas de interconexión del móvil, que es lo que se pagan las compañías cuando
nosotros, los abonados, nos llamamos entre sí.
Naturalmente, ese
rebaja que exige la Comisión nos debería repercutir a los consumidores finales;
si no se hace, las rebajas se retrasarán. Este ajuste debería empezar en abril
y terminar en diciembre de este año, y la CMT lo quiere llevar hasta enero de
2014. ¿Justificaciones? Que por el lío de nuestra orografía y otras causas aquí
es más complejo que en otros países. O que aquí es que los operadores ya han
bajado mucho las tarifas… Es verdad que hay más competencia, que han bajado
mucho las tarifas, pero.. ¿suficiente? No.
El caso es que
siempre nos acogemos a las moratorias o lo que sea con tal de retrasar lo que
beneficia a los usuarios. Pregunta: ¿Se hubiera retrasado si los perjudicados
hubieran sido las operadoras?
En España pagamos 16
céntimos de media por minuto y no es fácil encontrar países donde paguen más;
curiosamente, en la mayoría de los países de nuestro entorno pagan menos:
Francia 14 céntimos, Italia, 10… Y la media europea está también en 10
céntimos. Es decir, pagamos más de la mitad que la mayoría de los ciudadanos
europeos.
¿Acaso es que
consumimos menos? No, somos buenos consumidores de minutos de telefonía.
Incluso en las conexiones a Internet a través de los teléfonos inteligentes
también destacamos, por caros, claro. Una radiografía reciente del panorama
europeo en este campo realizado por OCU demuestra que en Italia podemos
encontrar conexiones a 5,42 euros cuando aquí la tarifa más barata se encontró
en ¡29 euros! y llegaba incluso a los 41. Eso sí, hay tanta disparidad de
precios, que aquí buscando y comparando podemos encontrar diferencias de hasta
un 30%. Algo es algo. Algunos se llevan mucho y otros se llevan más…
¿Acaso es que los
operadores en nuestro país tienen menos beneficios? Pues tampoco: Analizados 26
países, sólo en ocho los operadores ganan más con sus clientes que los
operadores españoles; en 18, sus márgenes de beneficio son menores. También en
esto somos de los más carito, por no decir lo más. Dicho esto, ¿ alguien puede
explicarnos por qué pagamos más que nuestro vecinos, casi todos nuestros
vecinos?
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